martes, 12 de enero de 2010

Catherine. Y él.

Nunca fueron pareja en la vida real, por lo menos no legítimamente, pero estos dos actores han realizado a lo largo de los años siete films juntos y conservan una amistad muy particular desde tiempos inmemoriales.

En EL ULTIMO METRO (1980) del cineasta Francoise Truffaut (este es de los buenos buenos en serio) , Gerard y Catherine cuentan una historia situada en el París ocupado por los nazis en la que el dueño de un teatro se esconde en un sótano mientras su mujer y actriz se enamora del protagonista de la obra que intentan estrenar.

Gerard y Catherine también protagonizaron LOS QUIERO A TODOS (1980), en donde el personaje de Catherine invita a cuatro hombres que ha amado a cenar en navidad.
En FORT SAGANNE (1984) es una historia en la que los dos intervienen otra vez y está ambientada en 1911 donde un ex combatiente se va hacia el sahara a hacer una nueva vida y resulta encontrar la gloria a través de la pacificación del desierto que lleva a cabo.

Después de catorce años ambos rodaron OTROS TIEMPOS (2004) del director André Techiné, historia en la que Gerard/Antoine se obsesiona con reconquistar treinta años después al personaje de Catherine (Cecile, que es casada y tiene un hijo) por las calles de Marruecos.


Si bien dicen que el gran amor de Catherine fue el inolvidable Marcello Mastroianni, con quien tiene una hija también actriz, Chiara Mastroianni, Catherine reconoce que a Gerard no solo la unen los films que hicieron a lo largo de sus carreras artísticas sino que una amistad que si bien no es de visita diaria, retoman cada vez que se vuelven a encontrar en los rodajes. Dice ella de él: “Gerard es un pilar importante de mi vida creativa”, cosa que puede o no ser verdad en esta mujer de belleza imperecedera que es reconocida no solo por su talento actoral ( y por ser musa de grandes de verdad como Truffaut, Roger Vadim o Polanski) sino también por su reserva y gelidez a la hora de hablar de las verdaderas emociones que ha vivido a lo largo de sus sesenta y seis años de vida y sus cincuenta y tres de carrera. En resumen, los tiempos cambian, los directores cambian y las reglas del juego cinematográfico cambian, pero ellos dos siguen ahí, Gerard, el loco talentoso de siempre, y Catherine tal cual la vi en el Festival de Cine de Mar del Plata hace unos años: bellísima, altiva y glacial. E inalcanzable.

2 comentarios:

maritza dijo...

salud comadre!!! pasé x aqui para no extrañarte. Aguante este sistema de acercamiento. Me encantan tus notas. Abrazos

Ale dijo...

holisssssss!!!!!
tanto tiempo!!!
no sabía de ésta "amistad" entre éstos actores che.... mirá vos! =)

espero que andes muy bien!!!
besos a la familia!!!
abrazos!