viernes, 30 de abril de 2010

¿Están tan lejos los rusos?


Están bien lejos los rusos, siempre han estado lejos los rusos, cinematográficamente hablando por lo menos. La geografía decretó que así fuera y la política colaboró también. Pero desde hace un tiempo a esta parte están más cerca los rusos. O por lo menos, MENOS LEJOS.
Eso me pareció cuando vi LA CASA DE LOS ENGAÑOS de Andrei Konchalovsky, con Julia Vysotsky, Stanislav Vark… y Bryan Adams. Ah si, a ese lo conocen, Bryan Adams, el rubio que canta ronquito.
La historia trata de un hospital psiquiátrico checheno en el que hay una paciente enamorada de Bryan Adams, a su vez los rebeldes chechenos invaden el hospital (que se ha quedado sin médicos por un tiempo), es así en donde los personajes intentan organizarse sin médicos y con una guerra afuera. No tiene nada de sangriento, ni de sexo, ni violencia alguna que hiera la sensibilidad.

Esta película es interesante y lo único que se necesita, si uno es un simple mortal de por estos lados, es agarrar un libro y saber quienes son los chechenos, que los hay pacíficos y también yihadistas…(a buscar en un libro eh, no en google...).

LOS GUARDIANES DE LA NOCHE de Timar Bekmambetov, esto es ciencia ficción basada en una trilogía de Lukianenko un novelista de allá. Esta es también una película con sensibilidad rusa (pero audiovisualidad de la nuestra) que trata la clásica lucha entre el bien y el mal, pero en clave de terror liviano.

También es recomendable EL ARCA RUSA del director Aleksandr Sokurov, esta película es un arriesgado plano secuencia total, o sea que el director le ató un steady cam (estabilizador de imagen real) a un sufrido camarógrafo y le hizo andar de aca para allá sin hacer corte alguno durante noventa minutos, en un tour llevado por el personaje del Marqués de Custine (Sergei Dreiden) y por la voz en off del mismísimo director Sokurov. Así es que en EL ARCA RUSA vamos disfrutando de un paseo por el Museo Hermitage de San Petersburgo y así participamos de un debate entre Europa y Rusia que relata los últimos tres siglos de Historia. ¿Pretencioso?
Si, y Sokurov tiene con qué responder.



sábado, 24 de abril de 2010

BIANCA ENCIERRA


El que menos pensaba de los 17 cuentos de mi primer libro....fue el más comentado, el más elogiado y el que más satisfacciones me ha traído.
BIANCA ENCIERRA

“Era tan pero tan profunda nuestra alianza,
que nos encontrábamos todas las tardes
en nuestra muda locuacidad”
(Nadine Alemán)

Bianca encierra las pocas ovejas en el corral todas las tardes. Y vuelve al rancho con las piernitas envueltas en abrojos y temblando por el frío hostil de la cordillera. Bianca y su vida suspendida. Bianca con ese padre viejo y acabado que no le dio más vida que esa vida, llena de ausencias. Bianca y las estrellas.Pero ella sale inmutable cuando lo oye decir, a veces como única frase en todo el día: “¡Bianca, encierra!”.
Ella sale del rancho y encierra todo lo que puede, las gallinas, las ovejas, la puerta de la despensa. Hace todo lo que él le pide mientras lo ve envejecer. Hace el pan (le pone harina de la buena y lo amasa con leche fresca para que quede mas blando y no le arruine los dientes al viejo), y no se queja del agua helada del arroyo cuando lava la loza. Le compra pilas nuevas a la radio, pega el hule del mantel cuando se raja, zurce repasadores y medias. Hasta pesca con la latita en el arroyo para que no sean siempre fideos, papas y carne. Y cuando va al pueblo, Bianca tarda. Hace despacito el camino de regreso, como soñando que nunca llega.
A su padre lo acuesta, lo levanta, calienta el agua en el tanque de la cocina a leña y le prepara el fuentón de lata para bañarlo. Y apaga las velas temprano para que Ella, la Muerte, si llega no lo vea.
Espera la noche para dejar las cortinas corridas y desde su cama ubicada estratégicamente bajo la ventana, ve las estrellas lejanas que la helada patagónica vuelve mucho más brillantes, como un regalo íntimo, solo para ella. Ni bien se acuesta, Bianca se pierde en un viaje único. Es otra, vive otra vida, goza el destierro nocturno y se hace a él soñando que tiene amigas, que tiene marido, que tiene hijos, que tiene calor y que tiene un destino. Así se duerme hasta el otro día, cuando al amanecer otra vez se levanta, otra vez suelta las gallinas, las ovejas, abre la puerta de la despensa.
Otra vez el día, la luz, el campo, el trabajo duro, el viento y su padre. Pasando como siempre las horas lentas, hasta el atardecer, donde vuelve a encerrar.
Y sobre todo Bianca encierra. Encierra esas ganas de dejar esa noche las velas encendidas para que si Ella, la Muerte, esta noche viene, entregárselo de una vez y luego perderse finalmente en la vida que ella tiene en las estrellas.-

viernes, 23 de abril de 2010

EN SUSURROS



Hoy musitaré en tu oído.

Se irá la palabra por los recovecos de tu mente
filtrándose en la fuentes de las obsesiones de tu cuerpo.

Te diré al oído mil razones
por las que corre mi sangre tan violenta.

Voy a susurrarte mis deseos insondables
a dictarte con detalle el camino del amor.

Te pediré que nunca lo digas.

Que jamás le quites fuego
al pulso sensual que te infundo.

No develes nuestro secreto con la denuncia al aire
(no lo digas de ningún modo en voz alta)
no lo develes a la luz.

Guárdalo esconde con furioso celo lo que diga
déjalo en la tiniebla.

Júrame que nunca,
nunca, nunca.

martes, 20 de abril de 2010

SONRISA DUPLICADA





















Si uno le dice a un espectador cualquiera que nos diga cuál es la sonrisa del cine que más recuerda, inmediatamente recibiremos como respuesta “la de Julia Roberts”. Y es cierto, esta joven que actuó junto a su hermano Eric en la cinta SANGRE ROJA (1986), que él mismo dirigió, tiene la sonrisa más amplia y seductora del cine yankee.

Pero no es solo eso. Julia tuvo que trabajar bastante para ser actriz protagónica y posicionarse como una las más recordadas actrices por su belleza y desempeño actoral. Ha hecho más de treinta películas y su versatilidad ha quedado más que demostrada en proyectos de muy diferente naturaleza como lo son BAJA OKLAHOMA (1987) donde es una camarera que aspira ser una compositora de música country, o en MAGNOLIAS DE ACERO (1989, adaptación de la obra de teatro del mismo nombre) donde se cuenta la sencilla vida de mujeres de pueblo que se reúnen en la peluquería y en donde comparte cartel con Sally Field, Dolly Parton y Daryl Hanna entre otras.

Su gran éxito, y que la llevó a ser nominada al Oscar y a ser una de las personas mejor pagas del rubro actoral, fue el protagónico de MUJER BONITA (1990), con Richard Gere, en donde con veintitrés años y una figura escultural, luce la proverbial sonrisa que quedó en nuestra retina para siempre, entregándonos la calidez que hoy en dia les falta a tantas actrices que interpretan personajes en películas del corazón, como en su momento lo hizo Julia.

QUÉDATE A MI LADO (1998) es un proyecto que la encuentra más madura en su fase artística y donde encara la tediosa tarea de la producción. Allí encontró la amistad de una ya consagradísima Susan Sarandon, con quien protagoniza el film. En este drama familiar Julia explora las emociones humanas desde el sufrimiento que da una familia compleja y la aparición de enfermedades.

Algo muy diferente hace en CLOSER (2004) en donde se sumerge en la infidelidad y las relaciones entre dos parejas que se quiebran y que se meten en problemas por hacerle caso al deseo. Particularmente me costó verla ya que le encuentro más giros teatrales que cinematográficos (fue escrita principalmente para teatro y adaptada por el mismo guionista para cine) pero el final es más que interesante.

Lo último que nos entrega Julia es su trabajo en DUPLICITY, en donde interpreta a una ex agente de la CIA que ahora intenta robarle la fórmula a una empresa multinacional para que se llene aún más de dinero.
Mmm, no sé, es demasiado rebuscada la historia y personalmente sigo prefiriendo la amplia, cálida e inolvidable sonrisa de Julia mientras pasea con Richard Gere.

miércoles, 7 de abril de 2010

LETAL INTENSIDAD


El guión es hacer cosas para maravillar a otros. Es lo que elijo hacer con elementos que conozco, que acomodo con fines concretos, milimétricos. El guión es el placer de lo dócil, la creatividad deliciosamente relacionada con la exactitud.
El cuento para mí es el mundo que desborda de mi imaginación. La espuma, también coherente, de miles de utopías que contengo y no puedo atajar en su derramamiento.

La poesía es lo que soy, lo que no puedo evitar, lo que se escapa de mí como un líquido cruel que tampoco intento retener.A LETAL INTENSIDAD lo escribí durante mucho tiempo, analizando concienzudamente el camino de la sutil efervescencia de los sentidos que siempre embargan la vida de una mujer. Ese impulso vital del descubrimiento primitivo del propio género. Sin que lo primitivo adolezca, sin que resulte pobre o resignado, sino descubriendo la franca fatalidad del hallazgo de una emocionalidad ineludible a veces.

Esa ensoñación del otro, la constancia minuciosa de idealizarlo es esta primera secuencia titulada DEL IMPULSO VITAL, el reflejo forzoso de la inmadurez que se presenta inevitablemente bipolar.

En la segunda secuencia, TU BORRACHA SOLEDAD, intento derramar una poesía melancólica, no sublime sino irónica y efectiva. Un soplo nocturno arrastrado, ebrio y tanguero. Húmedo, vengativo y final.

MAPAS DEL DOLOR, la tercera secuencia, intenta dar una voz sobre las realidades que dolorosamente se dan en la actualidad, donde los femicidios y la violencia contra la mujer son noticias diarias que más de una intenta sofocar en un lavabo donde la propia sangre se mezcla con el llanto ahogado, que se va tan rápido como vuelve la promesa de no permitirlo nunca más. Mapas trazados sobre nosotras mismas, nacidos quizás en lo fantasmagórico y perturbador de un amor incauto, aquejado por el padecimiento innecesario que rige a veces la cotidianidad.

ANTIGUAS PREMONICIONES, la secuencia final, delata a dos mujeres consumidas en el capricho de las pasiones vanas, tan irrevocables y turbulentas como certeras. Invadidas por premoniciones ardientes que les valió entrar en la inmortalidad de la historia que tanto nos gusta escuchar.Lo que más claro me queda es que la intensidad es concluyente, nos atraviese frágil, serena y sigilosa como nos invada precipitada, irreversible y letal.

martes, 6 de abril de 2010

Tragos Secuencia


Es conocida la pregunta que se hace la gente cuando ve ebrios en pantalla: “- ¿Este tipo está borracho en serio???”. Y es natural, porque hay actores que muy en serio recrean borracheras para sus personajes que uno no sabe cómo definir. Uno no sabe, como espectador, pero la mayoría de los grandes “borrachos” del cine han hecho de la ebriedad un código, y hasta se definen estilos a la hora de filmar.

Por ejemplo está el trago francés, saboreado y pausado, como los que se tomaba John Barrymore y del que fue maestro el compadre. Está también el trago ruso, propio de Kirk Douglas que con un fondo blanco nos dejaba atónitos esperando que se vaya zigzagueando. También está el trago alemán que se daba Emil Janing y Vincent Price, y que recordarán que se dio Harpo Marx en la película EN EL OESTE.

El trago británico es conocido también porque se lo dieron Peter O’Toole y Richard Burton, un trago que se toma en pequeños sorbos sobre el borde del vasito. Y tenemos el mejor y más espectacular que es el trago americano (siempre convenimos que los yankis tienen sentido del espectáculo para todo, hasta para eso…), este trago americano tiene la particularidad que se toma empinando la botella, lisa y llanamente, y sus maestros son Antony Quinn en VIVA ZAPATA (el que lo vio, no puede negar que le tipo la lleva con ese trago secuencia) , Humphrey Bogart en LA REINA DEL ÁFRICA lo desarrolla bastante bien, como Gregory Peck en GRINGO VIEJO y Clint Eastwood en SIN PERDÓN.
Pero el que se lleva la estatuilla de la botella de oro es sin duda William Holden en la película GRUPO SALVAJE. Por Dios que borrachera se habrá agarrado si en esa botella había whiskey en serio. Por último debemos recordar el trago irlandés, una síntesis de todos y el más refinado y bello a la hora de filmar, y bien lo supo John Ford en LA JUNGLA DE ASFALTO mientras dirigía a Sterling Hayden allí tomándose el trago. También se ve maravilloso Gregory Peck alcanzándole un tequila a Pancho Villa en GRINGO VIEJO.

En fin, un trago ritualizado, como estos que acabo de enumerar, no son caprichos de un director o debilidades de un actor, más bien son la radiografía de un carácter, de un estilo de vida, de un lenguaje dentro de otro lenguaje, y finalmente se transforman en momentos inolvidables del cine, como debe ser.
Salud.